lunes, 9 de mayo de 2016

Jane


Un western siempre es un western para mí. Es decir, entretenimiento seguro. Parece que Janet got a gun defrauda porque no es la típica película del oeste postmoderna de perspectiva feminista, como la crítica esperaba. No es tampoco una película oscura de violencia como The Hateful Eight de Tarantino. Es más bien la tópica historia romántica de western que se desarrolla entre el presente y los flash-backs. Una presentación temporal que ha sido señalada como una posible debilidad y que puede que fuera más cómoda en literatura que en su visualización en pantalla.

Así que es recomendable para almas que disfrutan de las viejas historias de amor de las Cheryls, tanto las St. Johns como las Reavis. Una más de las historias de amores y decepciones del viejo Oeste. Una simple película para pasar una tranquila tarde de domingo.


Janet got a gun (Gavin O'Connor, 2016)



martes, 26 de abril de 2016

Bodegón


Caravaggio (ca. 1595-1600)

"Una explosión amortiguada de morbidez y aspiración metafísica (...)
Son frutas de finales del verano, suculentas en su madurez pero que han empezado a pasarse".

Andrew Graham-Dixon, Caravaggio: una vida sagrada y profana (2012).

sábado, 23 de abril de 2016

A Roma sepultada

Roma antigua según Pirro Ligorio

A Roma sepultada en sus ruinas

Buscas en Roma a Roma, ¡oh peregrino!
y en Roma misma a Roma no la hallas:
cadáver son las que ostentó murallas
y tumba de sí propio el Aventino.
Yace donde reinaba el Palatino,
y limadas del tiempo, las medallas
más se muestran destrozo a las batallas
de las edades que blasón latino.
Sólo el Tibre quedó, cuya corriente
si ciudad la regó, ya sepultura
la llora con funesto son doliente.
¡Oh Roma! en tu grandeza, en tu hermosura,
huyó lo que era firme y solamente
lo fugitivo permanece y dura.

Francisco de Quevedo
El Parnaso español, 1648

viernes, 22 de abril de 2016

Perecerán

Siembra y cosecha y atónita asiste a la ceremonia.
Suplantaciones hasta del alma que el verde traspasan.
Retuerce índice y pulgar y arranca con rabia.
Los pastos. Las flores.
Perecerán.

sábado, 20 de diciembre de 2014

A... Goethe... a.

Me has ... 
por lo que amamos 
modelado
donde menos lo esperamos
solo tú
las mayores dificultades encontramos
envilecido
... no me has.

sábado, 22 de noviembre de 2014

La edad peligrosa


Interior, Hammershoi (1906)

¿Qué voy a hacer aqui? ¿Qué quiero hacer aquí?
Llorar sin tener que rendirle cuentas a nadie de los motivos...
Está claro que todo esto es culpa de esa dichosa lluvia. Si estaba deseando todo esto. Y no es un capricho histérico, nada de eso.
Yo misma me he recluido entre estas cuatro paredes (...)

El ser humano se encuentra solo, el ser humano se encuentra solo. Cada mujer habita su propio planeta, hecho de fuego con apenas una costra de tierra endurecida alrededor. Y del mismo modo que las estrellas transitan sus eternos caminos por el espacio, así recorren las mujeres sus sendas solitarias en la vida.
Mejor les iría caminando descalzas sobre cristales, pues ese dolor nada sería comparado con el que siente cuando, con una sonrisa, abandonan la propia juventud para adentrarse en esa desesperación que llaman vejez y senectud.

Karin Michaëlis, La edad peligrosa (Den farlige alder, 1910)

miércoles, 1 de enero de 2014

TIP TIP







Despiértalas,
con contactos saltarines
de dedos rápidos, leves,
como a músicas antiguas.


Pedro Salinas, "Underwood girls", Fábula y signo (1931)

domingo, 29 de diciembre de 2013

Come, Lucia


Cómo te habría encantado, el Cabo Norte… los fiordos y el sol de medianoche.
Navegar entre los arrecifes en Barbados donde el agua azul se torna verde.

¡A las Malvinas, donde los vientos del sur cubren de espuma el mar!

Lo que nos hemos perdido, Lucia.
Lo que nos hemos perdido los dos.
Adiós… querida mía.


El fantasma y la señora Muir (Ghost and Mrs. Muir, Joseph L. Mankiewicz, 1947)

sábado, 28 de diciembre de 2013

La despedida


La despedida de Sir Lancelot y la reina Ginebra
Julia Margaret Cameron (1874)

Mil soles brillarán sobre ti,
Mil lunas se estremecerán,
Y por tus riberas, mis pies ya no andarán,
Ya no, eternamente.


A thousand suns will stream on thee,
A thousand moons will quiver;
But not by thee my steps shall be,
For ever and for ever. 

Alfred Tennnyson

Curiosidad e invención


Cuando perdemos la curiosidad, perdemos la capacidad de inventar y empezamos a volvernos viejos

Guillermo del Toro

viernes, 27 de diciembre de 2013

Verdadero


La pregonada autenticidad no es histórica, sino virtual. Todo parece verdadero y por consiguiente es verdadero; en cualquier caso es verdadero el hecho de que parezca verdadero y damos por verdadero el objeto al que se asemeja; incluso en el caso, como Alicia en el País de las Maravillas, de que no haya existido jamás. 


Umberto Eco, Los pesebres de Satán, La estrategia de la ilusión.

miércoles, 25 de diciembre de 2013

Pequeño pastor


Las manos nudosas y encallecidas todavía creaban maravillas. Don Jesualdo pedía figurillas para su Belén y Salzillo las realizaba a ratos, aprovechando los momentos en que descansaba y todavía había un poco de luz. 
"Este trozo de madera que quedó de los Azotes servirá". 
Y así, poco a poco, el escultor desprendía con la gubia y el mazo minúsculas virutas, alisando la superficie con la escofina, mientras iba apareciendo un pequeño pastor. 
"Será como San Pedro en el Prendimiento, anciano pero vigoroso y en vez de blandir la espada se quitará la montera, en señal de respeto". 
Y así seguía, acariciando el veteado leño, desprendiendo con los dedos algunas astillas que quedaban adheridas. 
"Las piernas han de ser fuertes, nervudas, como el torso, pero al caminar será preciso portar una vara, en vez de recoger la túnica", pensaba para sí. "Las manos son grandes, algo rudas, como las mías, pues al igual que a las del pescador, en ellas me diste la fuerza, por lo que yo te pido, querido Padre, que les sigas transmitiendo un poco, tan solo una pequeñísima parte de tu savia creadora". 
Transcurrían los segundos y algunos minutos después se concentró entonces en el rostro: "Sea el mío, pues". Con extrema delicadeza, con pequeños movimientos, aparecían los ojos de mirada penetrante, la nariz aguileña, la elegante forma de la barba y la expresión plena de respeto y de emoción, dando vida a la orgánica materia. En menos de una hora el pastor ya había surgido casi como un milagro a falta tan solo de darle policromía: "Las tintas han de ser planas, ocres, la carnación cuidada, algo tostada por la calidez del sol de esta bendita tierra". 
Terminada así la obrita, el ya afamado artista la contemplaba ladeando la cabeza mientras los pigmentos  levemente barnizados se secaban. Entretanto, proseguía con su oración: "Gracias, Niño Divino, por todo lo que me has dado, por ese gran privilegio de poder representarte y estar así a tu lado todos los días de mi vida. Te ofrezco mi obra a través de la cual otros te adorarán. Se acerca ya el final y muy pronto estaré contigo". 
Y el delicado pastor con el rostro de Salzillo allí quedó, al lado del Portal, junto a las pequeñas pero grandiosas esculturas que componen su famoso Belén y que sigue causando tanta admiración a todos los que lo contemplan.